Con el confinamiento que se impuso para contener el avance del coronavirus, muchas personas experimentaron grandes episodios de estrés que buscaron contrarrestar con hábitos saludables para facilitar la situación. Por esta, razón hay quienes creen que la alfarería es el nuevo yoga, ya que promueve la meditación táctil mediante la creación de nuevas formas e ideas.
Es decir, la alfarería se ha convertido en una nueva forma para practicar el mindfulness, aumentar el control de las emociones y la percepción de nosotros mismos.
Ventajas de practicar talleres de cerámica y alfarería como yoga
Además, de mejorar la creatividad y liberar el estrés mediante la desconexión, la técnica de la alfarería como yoga se enfoca en estimular tanto la mente, como el cuerpo y el espíritu. A través de esta práctica se pueden conseguir varios beneficios que mencionamos a continuación:
- Aumenta la concentración: el trabajo con la cerámica ayuda a que nuestra mente despeje aquellas cosas que nos atormentan para concentrarse en el trabajo que en ese momento realizamos. Además, es ideal para quienes tienen problemas de concentración.
- Fortalece músculos: el movimiento que se ejerce para trabajar la cerámica ayuda al fortalecimiento no solo de las manos, sino de las muñecas y brazos. Es decir que es una disciplina que propicia la prevención de artritis.
- Disminuye el estrés: como habíamos mencionado, durante el confinamiento fueron muchas las personas que lograron reducir sus niveles de estrés con la alfarería. Esto se debe a que ayuda a la inhibición de lo que sucede alrededor.
- Impulsa la sociabilidad: aunque la alfarería es un trabajo individual, generalmente las clases son impartidas para grupos pequeños. Por tanto, los integrantes deberán conocerse y al menos, comentar sobre las clases antes o después de las mismas.
- Mejora la creatividad: es una actividad que reta al estudiante o participante a explorar su imaginación, así como la creatividad, ya que debe crear tantos objetos con diseños originales.
¿Cuáles son las herramientas básicas para iniciarse en la alfarería?
Generalmente los talleres de alfarería incluyen todos los instrumentos básicos para mayor comodidad de los alumnos. Sin embargo, si queremos iniciarnos por sí solos es importante saber cuáles son las herramientas básicas que necesitan:
1. Esponjas
Se trata de una herramienta muy útil, debido a que ayuda a medir la cantidad de agua que se utilizará. Usar la esponja al inicio del proceso es imprescindible, ya que, si el torneado está muy seco, la arcilla no gira y se seca. Igualmente, si la mezcla queda muy líquida el trabajo no se hará bien.
2. Alambres de corte
Los alambres son ideales para cortar el barro en bloques. Pero cuando se trata de alguien amateur, se pueden acceder a herramientas más económicas como una pinza de madera o el hilo de pescar.
3. Alambres y punzadores
Estos dos instrumentos se mencionan juntos, porque comúnmente suelen venderse en kit bien asequibles. Estas herramientas tienen la función de dar forma a la figura y para dibujar detalles.
4. Moldeadores de madera
Son piezas finas de madera pequeñas, su tamaño es muy similar a un lápiz. Además, son elásticos y muy sencillos de usar para moldear el barro. Adicionalmente, se trata de una herramienta fundamental que se necesita para trabajar a mano o con el torno.
5. Espátulas y pinceles
Las espátulas utilizadas para trabajar la cerámica son muy similares a las que usan los pintores. Es decir, el material del mango es de madera mientras que uno de sus extremos tiene metal, con lo cual se le da forma a la pieza.
Por otra parte, los pinceles no deben faltar e incluso, siempre deben estar muy cerca del área de trabajo. Esto se debe a que con este instrumento se retoca la figura y también ayuda a rectificar la cantidad de agua.